Stardust – Neil Gaiman

(Polvo de estrellas)

Ahora voy a escribir sobre Stardust, para mí, ha sido un libro extraño. Sólo por el hecho de que la primera parte de éste ha sido un muermo. Y uso muermo queriendo decir aburrido, a partir de la cincuenta páginas me planteé dejarlo, pero como no era muy grueso, seguí.

Para mi sorpresa, unas cincuenta páginas más adelante, algo empezaba a suceder, y es que los sucesos que me parecían innecesarios y un poco pesados, al final, convirtieron a esta historia en algo más de lo que esperaba.

Esta es una de ésas historias que no puedo soltar tras haberla terminado, sólo por la satisfacción que me deja (sé que lo vivo)al final. Una sonrisa y una lágrima.

Sólo sabía que era un “cuento de hadas para adultos”, y decidí empezar por éste para ir conociendo a este autor que tanto me había recomendado un ser, no se si humano Además, hicieron la película basada.

Si cogiera el libro y lo observara por detrás, podría observar, entre el nombre del título, el autor y el ISBN, una especie de texto, que intenta resumir, en bonitas palabras, una advertencia de lo que alguien puede encontrar dentro. Un camino primero sinuoso y luego sorprendente, o no tanto.

El joven Tristan Thorn está dispuesto a hacer cualquier cosa para conquistar el frío corazón de su amada Victoria, incluso prometerle que le conseguirá la estrella que ambos ven caer una noche. para cumplir su palabra, Tristan deberá cruzar el muro que separa su pueblo del País de las Hadas, una vasto territorio donde nada se parece a lo que él ha conocido, donde ni siquiera las estrellas tienen forma de estrella y donde los unicornios, los duendes y los espectros campan a sus anchas.

Narrada de una mágica manera, parecida a la de un cuento sobre una chica lesbiana, pero que a la vez consigue transmitir a cualquiera su tontería, está lo que podría considerarse una bonita historia de amor con mucha magia, magia, hadas, casualidades, enamoramientos inoportunos y aventuras, con un final que alguien podría considerar típico, o mágico, o sorprendente, o triste, o incluso feliz.

Puede que algunas cosas resulten la mar de extrañas, yo no me quejo por que me gustan las cosas raras^.^

Ya te he advertido, si deseas leerlo después de todo, no lo dejes, termina el camino y lo agradecerás.

Como si le diera de puntuación cuatro estrellas de cinco.