Tras
una paciente espera por mi parte, acabo de ver la deseada película. Los Juegos
del hambre, que a diferencia del libro, no me ha dejado sin palabras. Esta
adaptación ha cumplido su función, aunque minimizando la violencia, dentro de
lo que cabe. No conozco el límite de edad, en el cine la calificaban como no
especificado. Pues sí, yo esperaba que fuera un poco más explícita, y que los
momentos épicos fueran más épicos. Esperaba llorar a lágrima viva, pero solo ha
conseguido arrancarme cuatro lágrimas (a diferencia de las jovencitas
emocionadas que estaban detrás de mi, ellas necesitaron pañuelos).
Pero
ante todo esto, y dejando de lado la cara cuadrada de Josh Hutcherson (Un
puente hacia Terabithia, pues mira, en esa película tenía la cara un poco menos
cube, le faltaría crecer, en fin.), me ha encantado. Algo inevitable, incluso
no habiéndola visto en versión original, y no gustándome la voz del doblaje
para Jenniffer Lawrence (Winters Bone), lo que le ha quitado mucha magia. Los
Juegos del Hambre, esa historia que tan épica y emocionante resultó al leerla,
tragando muertes y sintiendo cómo Katniss sufría, ha perdido empatía al pasar a
la gran pantalla. No por ello resulta decepcionante, ni mucho menos, pues hay
que comprender lo que pasaría en una adaptación de este calibre. El apartado
técnico es espectacular, en primer lugar quiero decir que el casting si es
bastante acertado, aunque la elección para Cato me ha resultado un poco rara,
tras haber visto a Alexander Ludwig ya en Los siete signos de la luz como niño
con poderes, y como protagonista, era bueno. Qué decir de Snow, yo me imaginaba
a un calvo ultrafino, no sé por qué, menos mal que han regulado mi delirio
mental poniendo en su papel a Donald Shuterland, y es que este señor tiene cara
de malo, no me digáis que no. Lo clava. (Y también poda ) Por otro lado tenemos
a Woody Harrelson como Haymitch, elección muy acertada, considerando que justo
ayer vi como se volaba el trasero en The Thin Red Line. Paula Malcomson ha
hecho una gran interpretación de la madre de Katniss, no por lo espectacular,
sino por que ha transmitido su actitud sospechosamente bien. Sobre el resto del
reparto sólo puedo decir que han acertado.
Sobre
el vestuario, qué decir, la extravagante moda de la gente del Capitolio ha permitido
a los diseñadores romper límites y sobrecargar no solo lo rococó de sus
vestidos y trajes, sino también el maquillaje, eso se observa sobre todo en los
primeros planos de Effie Trinket (Elizabeth Banks). Aunque tampoco se han
cortado en vestir a los ciudadanos del Capitolio y los que presenciaban los
juegos y el programa de Caesar Flickerman (Stanley Tucci). Lenny Kravitz es
perfecto como Cinna, y aunque no lo pudiera parecer, el maquillaje le iba
perfecto para encajar con el personaje.
La
fotografía, impresionante. Por ejemplo han hecho un gran trabajo para grabar
las revueltas del Distrito 12, comenzando normal y acabando en una psicodelia
de planos, sombras y violencia. Las luchas cuerpo a cuerpo son bastante
confusas, y aunque eso no me gustó al principio, llegué a la conclusión de que
es lo mejor, así te pones de los nervios. A algunos no les gustará, y otros se
conformarán con eso, vivir el momento sin prestarle mucha atención a lo que
pueda ver la cámara, pero el temblor en el objetivo siempre está presente en
las escenas de acción, para bien o para mal. Los efectos especiales están a la
altura, PERO una cosa que no me ha gustado nada, los mutos, las aberraciones
que yo me imaginaba me gustan más, eso no pega nada. Muy mal.
Básicamente
la película es un resumen del libro, y como tal, se omiten cosas, cosas que a
veces son necesarias para que el espectador se ponga en situación. La sensación
que tenía al leer el libro no la he tenido al ver la película, y creo que
conozco la razón. Por un lado, el libro, narrado en primera persona y en
presente, hacen que, como ya he dicho, te pongas en el papel de Katniss,
comprenderla, pero no sólo eso. La gran cantidad de detalles que han sido
omitidos han hecho que la película pierda la esencia que tiene el libro y
mientras que en la película ves cómo se desarrolla una revuelta, en el libro
sientes la ira de la rebelión dentro de ti. Y sobre el Capitolio y sus
ciudadanos ¿Qué sabemos realmente en la película? Sólo vemos a unos flipados
obsesionados por la apariencia de un estilo extravagante con cara de que si no
hubiera Juegos del Hambre verían Gran Hermano. En la creación directa de
Suzanne Collins vemos de primera mano cómo es y mediante hechos lo que le
sucede a una sociedad de principios deformados en la que prima la injusticia y
la insensibilidad. Lo único que he encontrado perfecto en la película ha sido
lo referente a Rue, eso sí que me emocionó.
Sin
embargo, y con todo lo que he dicho, pienso que es una gran adaptación y la
recomiendo al cien por cien. Aunque claro, antes que la película recomiendo
leer el libro, pero así la película no gustará tanto ¿O si?